Descripción
Una niña con gafas muy amorosa y abrazando a la bola del mundo.
Es muy importante que los niños, desde muy pequeños, aprendan, a través de sus padres y sus educadores, a respetar y a valorar la naturaleza. El amor por la naturaleza les llevará a amar y apreciar el mundo natural y a actuar en correspondencia con estos sentimientos, contribuyendo a su cuidado y preservación. Es necesario que los niños comprendan que la salud del mundo depende de todos nosotros, de lo que hagamos para conservar todo bien cuidado, bello y radiante.
Hay que cuidar al mundo. La Tierra es nuestro planeta, cuidarla es nuestro deber.